Autor: Nicolás Raspe
Llegar a Argentina desde Francia no es cosa tan fácil. En esta tierra donde coronaron el exceso, es embriagante ver cómo viven ustedes cada cosa con tanta pasión, compromiso y convicción, cuando nosotros miramos nuestro pasado con orgullo y nuestro futuro con temor. Cuando olvidamos las luchas de hoy que iluminan el mañana, por unos euros más en un bolsillo ya agujereado. Nuestro país de las luces parece una estrella apagada : todavía resplandece de sus rayos históricos y culturales hacia América Latina, pero ya se apagó hace unos años, dejando sombras y hielo en la alegría de cada uno. Hoy el pueblo de Francia baja su mirada y contiene su respiración, mientras el pueblo de Argentina aprende cada día más de nuestros errores. Nosotros contamos la Historia a nuestros hijos como si fuera un cuento de hadas, ustedes la viven. Se levantan cada mañana para escribirla. Y por favor: nunca paren. Hasta Francia les agradecemos.