Hablamos con Ezequiel Fanego, editor de Caja Negra, sobre el proyecto que comenzó en 2005, los desafíos ante una coyuntura urgente y en relación al trabajo editorial.
M: ¿Cómo definirías a Caja Negra en tanto proyecto editorial?
EF: Definiría a Caja Negra a partir de una búsqueda incesante de herramientas conceptuales y experiencias sensibles que hagan de la vida algo más vivible. También como una plataforma en la que esas herramientas/experiencias entran en diálogo entre sí y alcanzan cierta potencia de comunicación.
M: Y este año en particular, ¿cómo fue para la editorial?
EF: Como me imagino que para la gran mayoría de las personas o colectivos, fue un año en el que tuvimos que recalibrar nuestros proyectos y expectativas. A su vez, la situación excepcional que atravesamos nos forzó a reflexionar mucho sobre lo que hacemos. Qué significa editar lo que editamos, qué otras formas de comunicación y encuentro con los lectores podemos explorar, qué vínculo puede haber entre los libros y los entornos digitales. Muchas preguntas que ya nos hacíamos antes de la pandemia y que esta intensificó.
M: En el último tiempo, grandes grupos editoriales decidieron eludir intermediarios -librerías y distribuidoras- y ofrecer su catálogo en Mercado Libre. ¿Cúal es su postura frente a estas nuevas formas de llegar al público? En relación a esto, en su sección de Jardines Virtuales se menciona la plataforma MercadoJusto.
Estos problemas que se enfrentan en la práctica distintos autores de su catálogo lo reflexionan en la teoría, como por ejemplo Nick Snricek en “Capitalismo de plataformas”. ¿Cómo describirías la relación entre los libros -específicamente la colección de Futuros Próximos- con la realidad social?
EF: A la hora de pensar estas cuestiones, para nosotros es importante tratar de salir de algunas falsas dicotomías. El entramado de librerías con las que trabajamos cotidianamente es fundamental. Las librerías fueron nuestro espacio de formación -y los libreros, nuestros interlocutores y aliados- y ese es el escenario principal donde lo que hacemos se encuentra con otros proyectos editoriales y con los lectores, por lo que nos pareció muy importante desde un primer momento, y nos sigue pareciendo ahora, pensar estrategias juntos para fortalecernos y no perder la centralidad de esas instancias. Nosotros no tenemos una tienda en Mercado Libre pero sí vendemos nuestros libros de manera directa en nuestra página, aunque estas ventas representan para nosotros un porcentaje muy menor. Nos interesa que exista esa instancia, no tanto por su resultado económico, sino más bien porque creemos que es importante el vínculo directo con los lectores, que permite algo distinto -y complementario- al vínculo mediado por las librerías. Es una instancia más que permite un recorrido profundo por nuestro catálogo y fortalece el diálogo con los lectores, pero en toda instancia buscamos promover la visibilidad de las librerías con las que trabajamos.
M: En Márgenes somos fanáticos de Futuros Próximos porque es un colección que nos ayuda a repensar el presente desde aquellos temas, que parecen un poco lejanos, pero que cada vez se inmiscuyen más en nuestra cotidianidad. La pregunta es: ¿cuáles son sus criterios de selección?, ¿cómo es el proceso de armado de esta colección?
EF: El proceso de armado de la colección pasa bastante por la relación entre el pensamiento y la realidad social, en otras palabras, nuestra vida cotidiana. La colección Futuros Próximos la concebimos por una necesidad íntima de todos los que integramos Caja Negra de dar respuesta a preguntas adecuadas para entender ciertos fenómenos del presente que nos resultan urgentes política y vitalmente.
La colección se va armando con ese criterio, poniendo en común entre los editores y colaboradores que están en contacto permanente con nosotros. Compartimos una serie de preocupaciones que creemos que son parte de un horizonte de problemas que tienen cierta pertinencia y a partir de esa búsqueda inicial, empezamos a hacer un rastreo de lecturas y materiales que nos vamos compartiendo e interpretando para obtener como resultado cuales son los libros adecuados para intervenir en el presente.
M: Por último, ¿qué planes tiene Caja Negra para el 2021?
EF: Tenemos muchos autores nuevos y tópicos urgentes -en una coyuntura cada vez más urgente- que abordar en nuestra colección Futuros Próximos. Los primeros libros van a ser “Geología de los medios”, de Jussi Parikka y “Vivir una vida feminista”, de Sarah Ahmed. También tenemos planes muy estimulantes para nuestras otras colecciones, como por ejemplo: “A la sombra del sueño americano”, que son los diarios del artista, y uno de los activistas pioneros durante la crisis del HIV, David Wojnarowicz.
Durante el 2021 y como parte de nuestras celebraciones por los 15 años vamos a lanzar también una nueva colección.